En esta ocasión sabía lo que iba a ver al teatro, ya que vi el teaser trailer de la obra y me llamó poderosamente la atención. Entré en la sala 1 de los Teatros Luchana y me quedé prendada de la escenografía de la obra; se me quedó una sonrisa bobalicona en la cara de lo bonito, elegante que estaba todo y eso que no había empezado la función. Al dar comienzo la obra es verdad que me descolocó un poco y no sabía muy bien por dónde iba a ir el texto, pero una vez que empiezan a contar sus historias y sin narrador, me lo pasé pipa. Sin pelos en la lengua, con un humor muy mordaz, muy irónico y en ocasiones un poco bruto: Aurora, Bella, Blancanieves y Cenicienta nos muestran la cara real de su cuento o lo que ha sido de ellas tras ese “y comieron perdices”. En un discurso poderoso, valiente y maravilloso nos damos cuenta de hasta qué punto nos han condicionado esas historias cuando éramos pequeños y pequeñas. Con No me toques el cuento, también somos conscientes de cómo otras princesas han ido conquistando nuestros corazones y estos cuatro originales personajes Disney han quedado relegadas a un segundo plano. En la trama hay tiempo para enfados, risas, bromas y para algunas canciones en la línea de la obra, satíricas, burlescas y con ganas de dar un golpe sobre la mesa sobre diversos temas. Ninguna de las cuatro actrices hace sombra a otra, siempre se complementan y van uniendo sus historias, siendo ellas por primera vez las protagonistas de su propio cuento. Me he reído mucho y sabía de lo que me estaba riendo en cada momento y si, dolía en muchas ocasiones, pero no podía parar de reír, ya que con cada carcajada que salía de mi garganta, un tabú, un cuento anticuado, un final feliz con perdices,una maldición a la antigua se rompía y salían a la luz varias realidades.Me gustaría ver otro No me toques el cuento con otras princesas o en la versión príncipe, pero con las mismas actrices.
Quiero ser mi propia heroína
No me toques el cuento
A partir de 11,00€
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